Por Neftalí Rivera.
El kickboxing es un deporte que se conoció en occidente gracias a películas provenientes de otros países en las que se veía a hombres en lo alto de un ring, cubiertos de heridas, de sangre e incluso con fracturas. Esto contemplado por una persona que desconoce la filosofía y el fundamento de estos deportes, puede provocar un rotundo rechazo, incluso en el caso de que a esas personas les fascinaran estos deportes. Por eso es tan importante que la información que se transmita sea veraz, que se conozcan las técnicas y beneficios reales de su práctica y en concreto del kickboxing. Sólo así podremos hacer la elección de practicarlo o no, con conocimiento y criterio, sin estar influenciados por informaciones erróneas que distorsionan la esencia de este deporte.
En los últimos años las mujeres se están animando cada vez más a la práctica de actividades, que antes solo practicaban los hombres. Este aumento comenzó con mujeres atraídas por el entrenamiento, sus beneficios y por el aspecto lúdico y recreativo de los mismos. Hoy en día el enfoque se ha completado y podemos encontrar clases de entrenamiento específicas de kickboxing femenino, mediante las que las mujeres que las practican pueden alcanzar metas y demostrar que son tan fuertes y constantes como cualquier hombre en los deportes extremos.
En la actualidad ya es frecuente que las chicas se coloquen los guantes y las protecciones reglamentarias y empiecen las clases con gran entusiasmo, descubriendo que son plenamente capaces, que les gusta y que se encuentran cada vez más seguras y confiadas en sus posibilidades
Durante mucho tiempo en nuestra sociedad existió la idea de que si una mujer practicaba algún deporte de contacto en un Dojo, era porque tenía características masculinas o andróginas. La realidad desmiente ese tópico [...] y en definitiva, la mujer también se pone metas y son más competitivas que los hombres en muchas ocasiones.
Sin embargo no podemos negar que, aunque por cortesía los hombres lo hagan, en general les molesta tener que guantear con una mujer, ya que esto condiciona un entrenamiento basado en el control de la pegada. Los hombres queremos entrenar pegando y recibiendo e inconscientemente cuando entrenamos frente a una mujer, controlamos mucho nuestra pegada. En el fondo este “entrenamiento control” será bueno para el hombre ya que desarrollará en ese tiempo, mucho más la técnica en detrimento de la potencia, y será un buen complemento para su formación. Pero para ellas esta “ventaja” de que el compañero de entrenamiento deje que le pegue, puede ser contraproducente ya que no experimentarán la sensación de recibir (los golpes), algo imprescindible en estos deportes.
En los últimos años las mujeres se están animando cada vez más a la práctica de actividades, que antes solo practicaban los hombres. Este aumento comenzó con mujeres atraídas por el entrenamiento, sus beneficios y por el aspecto lúdico y recreativo de los mismos. Hoy en día el enfoque se ha completado y podemos encontrar clases de entrenamiento específicas de kickboxing femenino, mediante las que las mujeres que las practican pueden alcanzar metas y demostrar que son tan fuertes y constantes como cualquier hombre en los deportes extremos.
En la actualidad ya es frecuente que las chicas se coloquen los guantes y las protecciones reglamentarias y empiecen las clases con gran entusiasmo, descubriendo que son plenamente capaces, que les gusta y que se encuentran cada vez más seguras y confiadas en sus posibilidades
Durante mucho tiempo en nuestra sociedad existió la idea de que si una mujer practicaba algún deporte de contacto en un Dojo, era porque tenía características masculinas o andróginas. La realidad desmiente ese tópico [...] y en definitiva, la mujer también se pone metas y son más competitivas que los hombres en muchas ocasiones.
Sin embargo no podemos negar que, aunque por cortesía los hombres lo hagan, en general les molesta tener que guantear con una mujer, ya que esto condiciona un entrenamiento basado en el control de la pegada. Los hombres queremos entrenar pegando y recibiendo e inconscientemente cuando entrenamos frente a una mujer, controlamos mucho nuestra pegada. En el fondo este “entrenamiento control” será bueno para el hombre ya que desarrollará en ese tiempo, mucho más la técnica en detrimento de la potencia, y será un buen complemento para su formación. Pero para ellas esta “ventaja” de que el compañero de entrenamiento deje que le pegue, puede ser contraproducente ya que no experimentarán la sensación de recibir (los golpes), algo imprescindible en estos deportes.
Por estos motivos es necesario que en las clases, las parejas de entrenamiento sean mixtas de forma cíclica.
Resumiendo amigos: la posición de los hombres respecto a las mujeres que practican deportes de contacto ha cambiado radicalmente, y se acepta con naturalidad la presencia de la mujer en el Dojo. Esto hace una década era impensable y, sin embargo en la actualidad, encontramos chicas muy destacadas a nivel mundial que podrían disputarle en igualdad de condiciones título a cualquier hombre de su mismo peso.
Gracias y hasta el próximo post.
Resumiendo amigos: la posición de los hombres respecto a las mujeres que practican deportes de contacto ha cambiado radicalmente, y se acepta con naturalidad la presencia de la mujer en el Dojo. Esto hace una década era impensable y, sin embargo en la actualidad, encontramos chicas muy destacadas a nivel mundial que podrían disputarle en igualdad de condiciones título a cualquier hombre de su mismo peso.
Gracias y hasta el próximo post.
Fuente: Clases de artes marciales
13 comentarios:
Creo que lo que al articulo menciona es muy cierto, inevitablemente la manera de entrenar con mujeres difiere de la de entrenar con hombres.
Lo de controlar la pegada es complicadísimo, la razón es que el cuerpo reacciona instintivamente al darse cuenta que lucha con una adversaria de porcelana, y si bien la caballerosidad más elemental te dice que hay que ir con cuidado, el cuerpo olvida eso y se activa para pegar con todo, incluso más fuerte que contra un hombre ya que tendríamos la certeza que va a caer de un golpe.
La verdad yo no me compro lo del peso, alguna vez Betty debieras luchar con las reglas de mi estilo (karate shotokan jka), aquí el que da el primer golpe gana, el único requisito es que el golpe sea técnicamente impecable (de hecho ojala que le marques a un centímetro y no le pegues), así solo tendrías que marcar bien el golpe y no importa si tu adversario es del doble de tu tamaño.
Y por supuesto que lo digo por los dos lados, como no me creo que tenga el combate ganado contra una chica de 50 kg, tampoco me creo que por ser grande tenga necesariamente que moverme como una tortuga. lo que decide los combates es únicamente la preparación previa.
Me muero de ganas de encontrar a alguien (hombre o mujer) para pelear estilo callejero, con ciertos códigos para no lastimarnos, pero con la idea de hacer la pelea lo más real posible. Con respecto al tipo de lucha del Karate que practicas, me resulta extraño que validen el punto de esa forma y que gane el primer golpe. Eso lo hacemos en las competencias de combate, pero solamente para los cinturones blancos. Nuevamente en una pelea "real", esto no se cumple: nadie se detiene luego de dar un golpe. Creo que una de las diferencias fundamentales (capaz que lo hemos mencionado en otro momento) es la continuidad del combate real. No hay puntos, ni árbitros, ni reglas. Me da la impresión que el combate deportivo se aleja cada vez más de lo que podría ser una sitación cotidiana, en la que verdaderamente necesitemos defendernos.
El karate que practico es 100% tradicional, y no se me ocurre nada mejor para la calle.
Precisamente por que en la calle no puedo darme el lujo de necesitar más de un golpe, yo por altura pegaría en la frente o en la garganta, tal vez necesite rematarlo, pero si le doy ya el resto de la pelea es un mero tramite. (además que si no acabar de un golpe abre la puerta a un contraataque.)
Tu también tienes bastantes armas para terminar la pelea de un golpe, aunque claro, entiendo que tal vez tengas un estricto código de honorabilidad que te impediría pegar donde cuenta.
Yo también practico un arte marcial 100% tradicional. Nunca se me hubiera ocurrido la idea de tener que defenderme con un solo golpe. Cuando pienso alguna situación imaginaria en la que deba pelear, me sale instintivamente una colección de golpes, aunque siempre me queda la duda de qué haría realmente estando en ese momento. Una vez vista la ventaja sobre el atacante, creo que seguiría dándole hasta asegurarme que está K.O. Tal vez como mencionas, el hecho de que hay varios golpes y lugares prohibidos, que de alguna forma se busca equilibrar con la defensa personal, es lo que me lleva a imaginar toda la situación con golpes legales. Si es con un hombre, espero que la lógica/instinto me haga pegarle en la zona delicada..
Claro que sí, si en un combate me pateas en la entrepierna y luego amistosamente me preguntas si quiero continuar la lucha, al monos yo te diría que no.
Pero la verdad Betty no lo necesitas, hay montones de lugares para terminar la pelea de un golpe, la lógica es lastimar a tu adversario lo suficiente para obtener una ventaja decisiva, incluso pisar el pie te serviría (reduces su movilidad y podrías escapar si quisieras). Pero incluso puedes hacerlo con golpes legales.
Yo hace un tiempo fui a un torneo donde se enfrentaban una cinturón naranja contra una cinturón café, el combate fue tan desnivelado como seguro te lo imaginas, la chica de café era más rápida y tenía mejor técnica, y de pronto manda a la lona a la de naranja con una patada circular en el estomago, tuvieron que atenderla, por suerte no pasó nada grave pero te aseguro que si hubiera sido yo (doble de tamaño y peso) quien recibe esa patada, hubiera pasado exactamente lo mismo.
Es claro que no te digo esto solo para una improbable pelea callejera, pero siento que tener la convicción que tus golpes pueden acabar a quien sea de un solo golpe de ser preciso, mejorará tu ataque y defensa así como tu habilidad en el combate en general.
Nunca se me hubiese ocurrido pisar el pie. Es un buen tip. Ahora con todo lo que me has comentado y juntándolo con lo que he entrenado, me parece que lo difícil (de mi parte) es saber cuándo lanzar ese golpe que sea capaz de darme la pelea. Recuerdo que una vez me mostraste un video muy bueno en el que se veía una mujer distrayendo a un asaltante, y luego le metía flor de golpe para sacarlo completamente de eje. Yo no tengo práctica en eso. Saber moverme para engañar con el cuerpo, amagar, distraer.. e incluso si no quisiera hacerlo y sólo me limitara a embocar una buena trompada, no sé si podría. Ahora entiendo por qué nunca doy el primer paso en combate, jaja y espero a que me "despierten" los ataques del rival para reaccionar. Sí, veo que nos falta entrenamiento en este punto. Y después te cuento otra cosa por correo porque me da vergüenza, jaja (olvidé comentarte que desde que Yahoo cambió de formato, ya casi no entro).
A la hora de enfrentar una pelea tienes 3 opciones, pelear limpio, pelear sucio o acabar la pelea antes de que empiece, el cuanto te manejes en cada una de ellas es lo que determina tu capacidad de combate. A mi en general me gusta el tercer estilo, hago lo posible para evitar la lucha incluso perder de antemano, si partes desde esta filosofía no debiera costarte "engañar con el cuerpo" ya que tu intención de no pelear sería sincera lo que generaría que el atacante (en caso que quiera luchar) se coloque en una posición donde te sea fácil darle el golpe decisivo.
En realidad pisar debiera ser de tus mejores golpes, debes usar tacos con frecuencia, y si peleas contra una mujer un pisotón va a ser el golpe que menos se espere además que las mujeres por regla tienen los pies más desprotegidos que los hombres.
Espero tu mail, también tengo cosas que contarte
No uso tacos, nunca usé y una suela de pocos cms ya me resulta incómoda, así que imagino que un taco debe ser peor. Estar con ellos en combate me dificultaría más las cosas. Generalmente uso calzado deportivo y championes. Acá se ven pocas mujeres con tacos. Si una situación se pone tensa, confío entonces en transmitir confianza con la postura de mi cuerpo, mirar siempre a los ojos de forma intimidante, y estar lista para golpear la entrepierna. Últimamente me estoy interesando más por la defensa personal, hasta hace poco me parecía un entrenamiento secundario. También como comenté en otra respuesta, nunca se me ha pasado por la cabeza que una pelea pueda irse al piso, en este sentido también estoy bastante desprotegida.
Deberías pedirle a una de tus compañeras que te ataque en serio mientras tu le bloqueas o esquivas
(probablemente un hombre tenga aprensiones por miedo a lastimarte), las patadas de tus compañeras deben ser las más rápidas (+ que los hombres y que las de luchadores de otros estilos), por lo que si te acostumbras a ellas, creo que tu defensa mejorará bastante.
Entiendo, podría ser una posibilidad, aunque la mayoría de las agresiones callejeras son hechas por hombres, así que preferiría luchar contra uno... Pero este tendría que tener el ego bien puesto para que no le moleste perder con una mujer, jeje.
También funciona al revés, ,mi truco favorito al luchar con mujeres es insinuarles que no necesito tomarlas en serio, (cierro un ojo, pongo un brazo en la espalda, y las pobres caen y se olvidan que tienen defensa.
Jajajaja, a mi me haría querer darte una buena paliza!
Ese es el truco, hacerte creer que estás enojada, te da todas las desventajas de la ira y ninguna de las ventajas.
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