Christy Martin es sin duda una de las boxeadoras más importantes de todos los tiempos. Seguramente la mayoría de los aficionados al boxeo recuerda su espectacular desempeño en las preliminares de "Tyson vs Bruno", allá por el año 1996, cuando el boxeo femenino se veía extraño ante la mirada del público.
Christy Martin peleó contra la irlandesa Deirdre Gogarty, quién aún habiendo perdido, supo resistir hasta el último round y brindar una pelea digna. Martin ganó por decisión unánime y luego de esa velada, se convirtió en una celebridad que acaparó todos los medios de comunicación. Fue muy solicitada por la prensa, brindando entrevistas, y apareciendo en las portadas de las principales revistas, ya sea en las dedicadas tanto al deporte, como aquellas del ámbito cotidiano.
Fue durante la década de los 90s un personaje muy presente a la hora de hablar sobre el boxeo, porque además de la singularidad de que una mujer se destaque en un terreno masculino, pudo demostrar que la deportividad y profesionalismo van más allá del género. Todos la recordamos como una peleadora con su traje de box rosado claro, tirando piñazos certeros, veloces y sobre todo, peligrosos. Lejos de generar detractores, hizo que el público se pusiera de pie ante cada una de sus peleas (me incluyo), que esperáramos con ansias ver su participación en el ring, además de ponernos a debatir sobre quiénes serían las valientes que se animarían a enfrentarla. Estos fueron temas de discusión durante la mejor etapa de su carrera, y a medida que finalizaba la década de los 90s, veíamos con agrado como un montón de boxeadoras se animaban a entrenar, ser profesionales, y trataban de brillar en el ring como la propia Martin, quién le abrió el camino a muchísimas deportistas, y elevó a alturas insospechadas el boxeo femenino.
También son recordadas las peleas en donde a pesar de venir perdiendo, logró revertir el resultado y salir ganadora. ¿Y quién no recuerda el inesperado knock out, producto del combate contra Laila Ali?
Christy Martin aún continúa su carrera de boxeadora, y seguramente se retire en la pelea número 50 (la próxima en realizarse).
Es y será siempre una ídola, y un ejemplo deportivo a seguir.
Christy Martin peleó contra la irlandesa Deirdre Gogarty, quién aún habiendo perdido, supo resistir hasta el último round y brindar una pelea digna. Martin ganó por decisión unánime y luego de esa velada, se convirtió en una celebridad que acaparó todos los medios de comunicación. Fue muy solicitada por la prensa, brindando entrevistas, y apareciendo en las portadas de las principales revistas, ya sea en las dedicadas tanto al deporte, como aquellas del ámbito cotidiano.
Fue durante la década de los 90s un personaje muy presente a la hora de hablar sobre el boxeo, porque además de la singularidad de que una mujer se destaque en un terreno masculino, pudo demostrar que la deportividad y profesionalismo van más allá del género. Todos la recordamos como una peleadora con su traje de box rosado claro, tirando piñazos certeros, veloces y sobre todo, peligrosos. Lejos de generar detractores, hizo que el público se pusiera de pie ante cada una de sus peleas (me incluyo), que esperáramos con ansias ver su participación en el ring, además de ponernos a debatir sobre quiénes serían las valientes que se animarían a enfrentarla. Estos fueron temas de discusión durante la mejor etapa de su carrera, y a medida que finalizaba la década de los 90s, veíamos con agrado como un montón de boxeadoras se animaban a entrenar, ser profesionales, y trataban de brillar en el ring como la propia Martin, quién le abrió el camino a muchísimas deportistas, y elevó a alturas insospechadas el boxeo femenino.
También son recordadas las peleas en donde a pesar de venir perdiendo, logró revertir el resultado y salir ganadora. ¿Y quién no recuerda el inesperado knock out, producto del combate contra Laila Ali?
Christy Martin aún continúa su carrera de boxeadora, y seguramente se retire en la pelea número 50 (la próxima en realizarse).
Es y será siempre una ídola, y un ejemplo deportivo a seguir.
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